jueves, 25 de diciembre de 2014

Navidades en crisis (aún no es "historia")


Rajoy lanzó la consigna: “Estas serán las primeras Navidades de la recuperación”. Pues no: los grandes comercios esperan subir sólo un 1% las ventas. Y los consumidores señalan que la mitad de las familias gastarán igual que las Navidades 2013 (poco), un 32% menos y sólo un 16% más. La crisis no es historia, como dice Rajoy, en contra de lo que opinan la mayoría de españoles: piensan que la situación económica es mala (38,9%) o muy mala (46,9%), según el Barómetro del CIS de noviembre. Y eso, porque dos tercios de las familias siguen con problemas, según el Informe Foessa: 5,4 millones de parados, 1,2 millones de ancianos con bajas pensiones, 2,2 millones de trabajadores con sueldos mínimos Enhorabuena¡: se los suben 3 euros...) y muchos de los 2 millones de jóvenes que ni estudian ni trabajan, más bastantes mujeres y mayores de 55 años. Para ellos, serán otras Navidades de crisis. Y peor lo tienen los 3 millones de pobres, 20.000 sin techo. No les olvidemos estos días y ayudémosles. ¡Feliz Navidad¡
 
enrique ortega

Esta Navidad va a ser un termómetro de si hay o no recuperación. La propaganda del Gobierno reitera que las tiendas y los restaurantes “están llenos”, pero los datos son menos optimistas. La patronal de los grandes comercios (Anged) cree que las ventas en diciembre crecerán un 1%, con lo que esperan un ligero aumento en 2014, tras 6 años de caídas. Pero los españoles no están por gastar mucho estas Navidades: la mitad de las familias gastará igual, un 32% gastará menos y sólo un 16% gastará más que en las Navidades de 2013, según un sondeo de la asociación de consumidores CECU, que habla de un gasto medio de 500 euros extras por familia estas fiestas. Casi la mitad para regalos (209 euros) y el resto en comida, ropa y juguetes, cuyas ventas aumentarán entre un 1 y un 2%. Y habrá menos viajes estas fiestas, sólo para un tercio de españoles. El boom de ventas va a estar en Internet, por donde comprarán regalos un 53% de los internautas, según TNS. Y como tiendas y empresas no lo ven claro, están con ofertas y súper rebajas para vender.

Al final, el consumo es cuestión de tener dinero para gastar y de confianza. Y la mayoría de españoles son pesimistas sobre el presente y el futuro, a pesar de que Rajoy les diga que la crisis es ya historia del pasado”. El índice de confianza del consumidor ha bajado en noviembre al nivel más bajo de los últimos seis meses: 83,6 sobre 200. Y la mayoría de españoles piensa que la situación económica es mala (38,9%) o muy mala (46,9%), según el Barómetro del CIS de noviembre. Y lo peor, no creen que vaya a mejorar: piensan que dentro de un año, la situación económica será igual (45,6%) o peor (24,3%) y sólo un 19% cree que será mejor. Y así, claro, no se animan a gastar. Los que pueden, porque otros no pueden. Y es que hay dos Españas y por tanto habrá dos Navidades (o mejor, cuatro).

Una España es la de los que tienen trabajo: 17,5 millones de españoles, de los que 14,4 millones son asalariados, 2 millones autónomos sin empleados y casi un millón empresarios. Una España a la que se han sumado 338.112 españoles que han encontrado trabajo desde las Navidades pasadas (la mayoría precario y mal pagado). Este grupo podría gastar algo más porque han bajado los precios (la inflación anual lleva cinco meses bajando, hasta el -0,4%) y pagan menos en carburante (por el desplome del petróleo) y en la hipoteca (por la bajada del euribor). Pero el problema es que a la mayoría no les han subido los sueldos (algunos han bajado) y les han quitado horas extras y complementos (y vales de comida). Y, sobre todo, que un tercio de ellos tienen contratos precarios (temporales y a tiempo parcial), mal pagados. De hecho, el sueldo más frecuente (2013) era de 15.500 euros brutos al año, según el INE, 1.107 euros brutos al mes (14 pagas), que netos son menos de 1.000 euros, Y según Hacienda, 7,7 millones de trabajadores declaran ganar menos de 1.000 euros al mes. Con estos ingresos, no es como para gastar mucho aunque tengan trabajo.

Dentro de esta España con trabajo, hay un grupo arriba sin problemas para gastar: son los que tienen buenos sueldos, los ricos y millonarios, unos 400.000 españoles. De hecho, hay 125.191 contribuyentes que declaran ganar 147.320 euros anuales de media, según Hacienda. Y entre ellos están los grandes directivos de las empresas del IBEX, que ganaron 789.721 euros en 2013, con una subida del 3,5%. O el Gobernador del banco de España, cuyo sueldo (174.734 euros brutos) subió un 5% en 2013 mientras sigue pidiendo moderación salarial... O los directivos públicos, como el presidente de la SEPI (empresas públicas, la mayoría con pérdidas), que gana 210.000 euros, el doble que Rajoy. Y no hay que olvidar a los grandes inversores (subió la Bolsa y les duplicaron los dividendos) y a los millonarios, que han crecido un 24% en 2014 y son ya 161.400 españoles (con más de 1 millón de dólares de patrimonio).

La otra España son los que tienen problemas económicos, dos tercios de las familias según el VIII Informe Foessa: 11.746.000 españoles que tienen problemas de empleo (tres cuartas partes), de vivienda (dos tercios) o de salud y medicamentos (la mitad). Aquí tenemos que incluir a los 5.427.700 parados (EPA septiembre), a los pensionistas con bajas pensiones (1.253.000 reciben menos de 600 euros al mes) y a muchos de los jóvenes ni-nis (2 millones de jóvenes que ni trabajan ni estudian), mujeres y mayores de 55 años (dos colectivos donde hay muchos ni-nis, que ni trabajan ni buscan trabajo porque saben que no se lo van a dar a ellos, y  no tienen edad para jubilarse). Son más de 7 millones de españoles con una economía de subsistencia, que hacen milagros (con ayuda de la familia y amigos) para llegar a fin de mes. Y que no están para muchos gastos estas Navidades.

Dentro de esta España con problemas económicos hay otro grupo que aún lo pasa peor, unos 5 millones de españoles en exclusión severa, según el VIII Informe Foessa. Una bolsa de pobreza (2,3 millones son niños, según UNICEF) integrada por tres clases de españoles: los 2.899.645 parados EPA que no cobran ningún subsidio (el 53,5% de los parados), los 2.271.130 trabajadores pobres que cobran el salario mínimo (645,3 euros hoy:  Rajoy se siente "generoso" y lo sube 3,3 euros para 2015 ) o menos y los 527.793 pensionistas que reciben menos de 400 euros, más los jóvenes, mujeres y mayores sin ingresos. Y dentro de estos españoles pobres, está el último escalón: 3 millones de familias en extrema pobreza, según Cáritas (Observatorio 2013), quien advierte que la pobreza se está haciendo más crónica (a la mayoría de pobres llevan ya 3 años atendiéndoles) y más extensa: ya no se trata sólo de inmigrantes y parados, ahora hay pobres entre familias con trabajo, sobre todo mujeres con niños, familias numerosas, jóvenes y ancianos.

Al final, son dos Españas (o mejor cuatro), con distintos ingresos (crece la desigualdad) y que sufren de forma diferente la crisis. Las dos primeras podrían gastar algo más estas Navidades, aunque sin alegrías porque no ven claro el futuro. Pero las otras dos, con pocos o ningún ingreso, lo tienen muy negro: la crisis les dura ya 6 años y se les acaban los ahorros y las ayudas de familia y amigos. Y tienen menos sitios donde recurrir. El Gobierno Rajoy y las autonomías han recortado el gasto en los servicios sociales, sobre todo de los Ayuntamientos, que atienden a 8.319.000 españoles (2013), que acuden a pedir ayuda, desde ropa, comida o medicinas a un techo (hay 20.000 españoles que viven en la calle), un subsidio o un empleo. Y las ONGs (que se financian en un 70% de ayudas públicas) ven caer sus recursos mientras aumentan los españoles que les necesitan (Cáritas atiende ya a 2,5 millones de personas y 3 millones comen cada día gracias a los bancos de alimentos).

Esta es la España real, con datos oficiales. Y para la mayoría, la crisis sigue ahí y no es historia. Así que si oye que ha mejorado el consumo estas Navidades, piense que es un espejismo: gastarán más los que pueden, un tercio de los españoles. Los otros dos tercios, siguen con estrecheces y sin ver claro el futuro. Y demasiados millones siguen en la pobreza. Son en los que deberíamos pensar estas Navidades, intentando ayudarles en lo posible. No podemos arreglar la crisis, pero sí colaborar para que algunos la sufran menos. Serán las sextas Navidades de la crisis pero que sean al menos unas Navidades solidarias.
¡Feliz Navidad ¡

1 comentario:

  1. Le tengo que felicitar por muchas razones, me gusta su blog y desafortunadamente, tengo algunos de mis amigos en esta tremenda situación.

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