Enrique Ortega
Hoy se ha iniciado una nueva era en la política
monetaria internacional, con la primera rebaja de tipos en los
últimos 8 años, aprobada por el Banco Central Europeo (BCE), que ha
reducido el precio oficial del dinero un -0,25%, dejándolo en el 4,25%,
el precio que tenía en agosto de 2023. Una rebaja que ha retrasado 9
meses, tras aprobar en septiembre de 2023 la última subida de tipos
(+0,25%), la
10ª subida aprobada en sólo 14 meses (desde julio de 2022 a
septiembre de 2023), que elevó el precio del dinero del 0% (en que
estaba desde 2016) al 4,50%, el tipo más alto
en Europa desde 2008.
Todo dependerá también del resultado de las elecciones europeas,
porque dentro
del BCE hay dos tendencias: los “halcones”, que defienden
una mayor “ortodoxia” (hasta que la inflación no se afiance en el 2%
objetivo, no hay que bajar mucho los tipos), apoyados por Alemania, Paises
Bajos, Austria y los paises bálticos, y las “palomas”, los
consejeros del BCE que defienden unos tipos más bajos, para reanimar la
deprimida economía europea, apoyados por Francia, Italia y España. Si la
derecha conservadora (y la ultraderecha) ganan
peso en el Europarlamento y en la futura
Comisión Europea, eso jugará a favor de la “ortodoxia” monetaria
en el BCE, retrasando y suavizando la bajada de tipos.