Entre los grandes cambios que ha sufrido España en las últimas décadas está la forma de vida, el tipo de familia que se crea: hemos pasado de hogares con muchos miembros (padres, hijos y abuelos) a hogares con menos personas. Así, el tamaño medio de los hogares ha pasado de 3,82 miembros (1970) a 2,54 (2021) y 2,41 personas por hogar en 2024, según el INE. Y actualmente, de los 19.370.408 hogares que hay en España, según el Censo del 1 de julio de 2024, el hogar más frecuente es la vivienda donde viven 2 personas (5.576.100, el 28,78% del total), pero le siguen muy de cerca los hogares una persona sola : son ya 5.452.100 hogares unipersonales, el 28,14% del total. Y les siguen lejos los hogares con 3 personas (3.877.021) y los que tienen 4 o más personas (4.464.644 hogares).
Y eso, porque casi la mitad de los que viven solos son
mayores de 65 años: en 2020, el
último año donde el INE publica datos detallados, el 43,64% de los
que vivían solos tenían 65 años o más, un porcentaje que había aumentado desde
2013 (cuando eran el 40,92% de los que vivían solos). Así que ahora, en 2024,
puede estimarse que el 45% de los que viven solos son ya mayores: 2.450.000
mayores que viven solos, 645.000 más que en 2013. Y además, la amplia mayoría
de estos mayores solos son mujeres (viudas en su mayoría,
porque la esperanza de vida de las mujeres, 86,20 años, es muy
superior a los hombres, que está en 80,74 años): en 2020, las mujeres que vivían
solas suponían el 71% de hogares unifamiliares y hoy se estima que las
mujeres serán el 75% de los que viven solos.