En medio de la crisis y de la tormenta de la deuda, un problema de fondo preocupa a los economistas y a los mercados: el despilfarro de las autonomías, cuyas cuentas pueden ser una bomba de relojería en los próximos meses. Ya se lo comentaron incluso los grandes empresarios a Zapatero en la Moncloa. La ministra Salgado ha conseguido un avance, al sacar a sus colegas autonómicos el compromiso de que publicarán trimestralmente sus cuentas. Pero de momento, en la foto de 2010, hay dos autonomías que tienen que tomar “medidas de calado”, porque tienen un “riesgo significativo” de no cumplir con el déficit previsto este año: Murcia y Castilla la Mancha. Y otras cuatro, tendrán que “hacer algo” para cumplir, aunque su riesgo es moderado: Comunidad Valenciana, Canarias, Galicia y Castilla León.
De momento, las autonomías señaladas con el dedo no se dan por aludidas e insisten que van a cumplir o que están en la lista negra por divergencias contables con el Gobierno central. Para forzarlas a “hacer los deberes”, la ministra Salgado ha anunciado ya que no permitirá endeudarse más este año a Murcia y a Castilla la Mancha. Pero sí al resto, con lo que las autonomías volverán a echar mano de las emisiones de deuda para cuadrar sus cuentas. De entrada, ya han emitido 27.226 millones de deuda este año y acumulan una deuda de 120.000 millones de euros, contando las empresas públicas autonómicas. Las autonomías más endeudadas son Cataluña (29.503 millones), Comunidad Valenciana (16.280), Madrid (12.592), Andalucía (11.472) y Galicia (5.544), aunque en deuda por habitante el ranking lo encabezan Cataluña, Baleares Comunidad Valenciana, Navarra, Castilla la Mancha y la Rioja.
Un total de 12 autonomías han emitido deuda en 2010, pagando para poder colocarla un tipo del 5,65 % (País Vasco) al 6,46% (Galicia). Con ello, compiten con el Estado central en captar fondos y encarecen la deuda española. Además, el País Vasco, Cataluña y ahora la Comunidad Valenciana emiten deuda para particulares (bonos patrióticos),compitiendo con bancos y Cajas (que se llevan un 3% en comisiones) y con la financiación de empresas y pymes, a las que encarecen el crédito (ya de por sí caro y escaso).
Cara a 2011, las autonomías tienen que seguir ajustando sus cuentas, recortando su déficit al 1,31 % del PIB para que España cumpla con Bruselas. Pero, de momento, 8 autonomías han aprobado unos Presupuestos que incumplen: Extremadura (2,30% déficit), Andalucía (1,55%), Navarra (1,53%), Cantabria (1,48%), Castilla y León (1,45%), La Rioja (1,43%), Canarias (1,40%) y Aragón (1,38%). Al Gobierno central sólo le queda la opción de presionarles y prohibirles que se endeuden. Pero eso no arregla el problema de fondo: tienen que intentar aumentar ingresos (impopular y difícil en plena crisis) o recortar gastos, que es la clave. Y no tanto en inversiones (harían caer a más empresas y perderse más empleos) como en gastos corrientes, entre ellos gastos de personal, muy abultados: en los últimos tres años, las autonomías han aumentado sus plantillas en 231.400 personas, mientras apenas crecían las del Estado (que debían haber caído) y las de los Ayuntamientos.
Bruselas, los mercados y la crisis va a obligar a un gran ajuste del llamado “Estado de las autonomías”, no tardando mucho. Haría falta un gran pacto político para poner orden en ingresos y gastos, para reducir la factura autonómica. Pero nadie quiere poner el cascabel al gato. Como en el caso de los Ayuntamientos, serán los hechos los que fuercen el ajuste, que vendrá por la sanidad y la educación, las dos grandes partidas del gasto autonómico. Murcia y Castilla-la Mancha ya han empezado a no pagar a farmacias y algunos medicamentos. La Comunidad de Madrid ha recortado un 4,8 % el gasto en educación para 2011.Y en Cataluña se ha hablado del copago en la atención sanitaria. De nuevo, por no tomarse decisiones económicas a tiempo, lo pagaremos todos en hospitales, medicinas, colegios y Universidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario