Formar a los empleados no está entre las prioridades de las empresas españolas. Y no es por la crisis: entre 2005 y 2009, las empresas han desperdiciado 835 millones en ayudas para la formación, ayudas que, para más inri, se han pagado con cuotas de empresas y trabajadores. Al final, las preocupaciones son otras y sólo 18 de cada 100 empresas aprovechan la formación bonificada, que recibe subvenciones del 50 al 100 % del coste de los cursos. Este despilfarro es especialmente grave en España, un país donde la mitad de la población no tiene acabado el 2º ciclo de Secundaria. Y un suicidio para el futuro, donde se sabe que,en un mundo global, sólo encontrarán empleo los que estén más cualificados.
Empresas y trabajadores pagan actualmente más de 3.000 millones de euros al año, con sus cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social, para financiar la formación de trabajadores y parados. En el caso de un mileurista, con un sueldo bruto anual de 16,000 euros, por ejemplo, la empresa paga 96 euros al año (0,60% de la base) y el trabajador otros 16 euros (0,10%). Con ese dinero se financian los cursos, que se subvencionan, del 50 hasta el 100% del coste, según el tamaño de la empresa, Además de estos cursos, organizados por la Fundación Tripartita (Administración, patronal y sindicatos), las empresas pueden organizar cursos propios y recuperar parte del coste (incluso todo) en bonificación de cuotas a la SS.
Pues bien, el mecanismo no funciona, como demuestran las cifras: entre 2005 y 2009, el 82 % de las empresas no ha utilizado las ayudas para hacer cursos de formación y se han perdido 835 millones de euros en estos cuatro años, según la consultora Garben. Las pymes son las que menos utilizan estos cursos (sólo lo hacen un 15%) y las que más lo hacen las grandes empresas (88% los usan). En total, 300.000 empresas y 3,5 millones de trabajadores utilizan estos cursos subvencionados, una cifra que, con todo, se ha quintuplicado en estos años.
¿Por qué no se usan más estos cursos subvencionados? Los expertos coinciden: por desconocimiento, se hace poca divulgación. Y también porque se pide mucho papeleo y a las pymes les da pereza gestionarlo (las grandes empresas tienen equipos en RRHH para hacerlo).Además, muchos cursos no responden a lo que se busca y hay pocos online (sólo el 18%). Pero demanda debería haber, ya que un 39% de trabajadores considera “absolutamente necesario” recibir formación de su empresa”, según un estudio de Randstad.
Lo grave de este despilfarro de recursos es que España se queda atrás: mientras en Europa se reciclan el 52 % de los trabajadores, en nuestro país sólo lo hace el 32%, según un estudio de la Fundación Élogos. Y el problema es que entre los que menos reciben formación están tres colectivos con alta propensión al paro: pymes (sólo el 14,2% acometen tareas formativas), los mayores de 55 años (sólo el 5,6% reciben formación) y los autónomos (sólo el 1,6% reciben cursos y autonomías como Asturias, Canarias y Madrid, les han recortado cursos).
Ante este panorama, el Ministerio de Trabajo acaba de aprobar una reforma: quitar dinero de la formación a trabajadores (60% del total, que no se usa) para gastar más en formación a parados (que pasarían de gastar el 40% al 50% del presupuesto de formación). La patronal no quiere este trasvase de fondos, ya que hay cuatro veces más ocupados que parados. Y tiene razón. Pero algo hay que hacer para evitar que el dinero para formación no se use. Todo el mundo sabe que estar preparado es una mayor garantía de empleo: para 2020 se espera en Europa que el 85% del empleo será cualificado, según el ministro Gabilondo. Pero eso no pasa por tener muchos licenciados (en España somos líderes en universitarios y en parados), sino por hacer una formación pegada a lo que buscan las empresas. Por eso son clave los cursos de formación a trabajadores. Gastar en enseñarles lo que necesitan saber.
Como se dice en la noticia, el futuro es un futuro globalizado y para eso, España está en desventaja.
ResponderEliminarSi comparamos la formación de los trabajadores españoles con la de otros países europeos, vemos un clarísimo desequilibrio.
Los españoles abandonan sus estudios y cuando finalmente se colocan en el mundo laboral, dejan de formarse.
Para hacer frente a esta situación de cara a la globalización, se ofrecen sibvenciones desde el 50 al 100% del importe de cursos, subvenciones que son usadas mucho menos de lo que beberían.
En mi opinión, las empresas, especialmente las PYMES, se darán cuenta tarde o temprano de la situación de sus trabajadores.
Vamos a pasos agigantados hacia una industria empresarial mundial en la que habrá un libre tránsito a la hora de la contratación y, una empresa, a la hora de contratar a un trabajador, va a contratar al mejor formado que encuentre de entre varios países.
Esto empujará y obligará a los trabajadores a renovar su capital humano para no quedarse atrás en un mercado de trabajo cada vez más grande, más duro y más competitivo.
Me interesa especialmente este artículo puesto que conozco de cerca algunos casos en los que la formación y el reciclaje de los trabajadores son muy importantes.
ResponderEliminarCreo que las empresas son poco inteligentes, primero rechazan el dinero de las subvenciones para los cursos pero eso si, si les quitas el dinero protestan, sinceramente no entiendo ese comportamiento. Según el artículo la mayoría reniegan de hacer estos cursos porque suponen mucho papeleo y sería perder el tiempo, pero la razón por la que digo que son poco inteligentes es que si ofreciesen cursos para formar a sus trabajadores serían mucho más productivos o estarían mejor cualificados y la empresa conseguiría obtener más beneficios, rechazan a muchas personas por no tener experiencia o formación, pero ellos tampoco asumen un mínimo de responsabilidad, es más fácil recortar sueldos y despedir a los trabajadores cuando el negocio no funciona.
Lo que si me parece correcto es que ya que las empresas rechazan este dinero, sea destinado a los cursos del paro, para mi es importante que estas personas puedan acceder a un puesto de trabajo formándose con unos cursos gratuitos aumentando su capital humano.
Por último creo que la formación depende de cada uno para conseguir un buen futuro, opino que sobretodo nuestra generación muchos no dan importancia a los estudios y como dice en el texto será lo único que cuente a la hora de conseguir un buen trabajo.
Alejandra Samitier Tainta, IES Jerónimo Zurita (1011B1D18)
Es una auténtica vergüenza que en el momento en el que se encuentra España, de recesión económica y con grandes problemas de dinero para empresas y particulares, se desaprovechen de una manera lasciva las pocas opciones que nuestro Gobierno da para mejorar.
ResponderEliminarCreo que es muy obvio que los trabajadores necesitan reciclarse y adquirir nuevos conocimientos ya que el mundo está en un proceso constante de cambio y se necesita siempre estar bien informado y bien adiestrado para poder mejorar la productividad de una empresa, que supondría por otra parte un granito de arena en la ayuda a salir al país de la crisis.
Veo bien la medida del Gobierno de quitar estas subvenciones para los que tienen empleo y aumentarla en los parados ya que si los trabajadores no las aprovechan, alguien lo tendrá que hacer, y quien mejor que personas que necesitan un empleo (ya sea estable o no), pero que necesitan un empleo para poder vivir.
Mario Pardos Peco. IES Jerónimo Zurita (1011b1C21)
Una vez leído el artículo, creo que es una equivocación que no se utilicen esos fondos monetarios en formar mejor a los trabajadores, para que desempeñen mejor sus puestos de trabajo, y la empresa de este modo sale también beneficiada, creo que puede ser por la cultura de nuestro país, poca gente una vez terminados sus estudios sigue formándose, nos acomodamos en nuestro puesto de trabajo, y nos arriesgamos de ese modo a que otra persona más cualificada ocupe nuestro lugar.
ResponderEliminarEs muy importante para una persona estar preparada para trabajar, y me parece correcto que si los trabajadores no están aprovechando los cursos, ese dinero no se pierda y lo utilicen los parados, para mejorar sus posibilidades a la hora de buscar un empleo.
El problema es que si se desconoce esta posibilidad, las PYMES no se preocupen por el lío del papeleo, y los autónomos estén tan ocupados en salir adelante con su negocio que no barajan la opción de realizar un curso, bien por falta de tiempo o por desconocimiento, los mayores de 55 años son personas que seguramente dejaron de estudiar y de formarse hace muchos años, y no se preocupen tampoco de estar mejor preparados.
Es una vergüenza que haya tantos licenciados, y a la vez tantos parados, creo que muchas empresas a la hora de buscar un trabajador, depende del puesto que oferten, necesitan más a una persona que tenga experiencia laboral, que a otra que tiene una licenciatura pero no ha trabajado nunca. De igual modo es bochornoso que ahora la gente joven no termine educación secundaria, puesto que es un instrumento básico para que te contraten. España debería invertir más esfuerzos en que su población consiga ser bilingüe, hablando un segundo idioma, como por ejemplo inglés, o francés, esto mejoraría nuestras posibilidades a la hora de buscar un buen trabajo en otro país.
Andrea Garcia IES Jeronimo Zurita 1011B1D09
Despues de haber leído el texto he visto que en España no se emplean el dinero que dan a las empresas para ayudar a mejorar la cualificación académica y laboral de sus trabajadores.Me parece muy mal que no traten de ayudar a mejorar sus condiciones de trabajo y no entregarles subvenciones para poder trabajar en lo que ellos desean.
ResponderEliminarEs una pena que en España muchos licenciados se tengan que ir a buscar trabajo al extranjero para que se les valores mejor.
Me da mucha rabia que haya gente que no se ha sacado ni el titulo de secundaria y muchas de esas personas estan trabajando y gente que la tiene este en paro y no se les ayude a conseguir un trabajo
Sara Montañés IES Jeronimo Zurita 1011B1D16