¡ Feliz Navidad ¡
El gasto de las familias españolas crece especialmente estos días, pero en realidad lleva creciendo desde el inicio del verano. Así, en el tercer trimestre, el consumo familiar creció un +1.2%, el mayor aumento en el último año (había crecido un +05% y un 0,7% en los dos trimestres anteriores), según el INE, lo que impulsó la economía, junto al turismo y la inversión, tras “pinchar” las exportaciones (por los aranceles y el estancamiento europeo). Y ahora, en este 4º trimestre, todo apunta a que el consumo habrá crecido algo más, empujado por el Black Friday (aprovechado para comprar anticipadamente los regalos de Navidad y Reyes) y por el mayor gasto previo a estas fiestas navideñas.
CaixaBank
Research ha detectado que el 25% de todo el gasto anual con tarjeta
(presencial y online) se concentra entre el 22 de noviembre y el 8 de
diciembre. Y este año ha vuelto a repetirse, con un aumento del gasto
del 24% sobre el resto del año y un +6,2% sobre el que hicimos en estas
fechas de 2024. El mayor aumento de este gasto “prenavideño” se ha dado en
electrodomésticos y tecnología (+76%), moda (+77%) y muebles (+48%), sobre todo
entre los mayores de 65 años (+30%) y en Madrid, Canarias, Cataluña y
Andalucía, donde el gasto ha crecido en esas dos semanas más de un 25% sobre el
resto del año.
¿Por qué ha vuelto a subir el consumo antes de Navidad? Hay
varias razones. La primera, porque ha aumentado la población que
vive en España, sobre todo por la llegada de inmigrantes: éramos 49.442.844 habitantes a 1 de
octubre, +345.967 habitantes más que en las Navidades pasadas. Y con el
aumento de población esperado para el 4º trimestre (128.500 el año pasado),
podríamos acabar este año con 475.000 habitantes más que en 2024. Pero
además de ser más a gastar, hay más personas con empleo, la 2ª razón que
explica el aumento de gasto: a finales de septiembre había 22.387.100 personas ocupadas,
+529.200 que en las Navidades pasadas. Y con el aumento de empleo esperado para
este 4º trimestre, cerraremos el año con 600.000 personas más trabajando que
en 2024.
Además, estos trabajadores récord tienen contratos más
estables (el 85% de los asalariados tienen ahora un contrato
indefinido), que les permiten gastar con menos “miedo”, y su sueldo ha
subido este año (+3,49% hasta noviembre, según los convenios) algo
más que los precios (+3% ha subido la inflación anual hasta noviembre, según el INE), aunque la
mayoría siguen preocupados por las mayores subidas de los alimentos sin
elaborar (+6,6%), la vivienda (+5,7%) y los hoteles y restaurantes (+4,55). Y
también ayuda a gastar algo más el ahorro en el pago de las hipotecas de
4 millones de familias, al haber bajado el tipo de interés oficial (el
BCE lo bajó del 3% en las Navidades pasadas al
2% ahora) y con ello, el Euribor (que ha bajado del 2,43% en diciembre de
2024 al 2,21% en noviembre de 2025).
Todo esto explica que las familias españolas hayan gastado
más este Black Friday y en el puente de diciembre y augura un mayor
gasto en Navidad y Reyes, empujado por un crecimiento de la economía que
duplica con creces el europeo (+2,9% esperado este año, frente al +1,3% la
UE-27). De hecho, España será uno de los paises europeos donde más
aumentará el gasto estas Navidades, un +4,8%, sólo superado por Hungría
(+5,2%) y Polonia (+5%), por delante del gasto esperado en Paises Bajos y Reino
Unido (+3,5%), la UE-27 (+3,1%), Alemania (+2,9%), Italia (+2,1%) y Francia
(+1,7%), según
la encuesta realizada por MasterCard en 9 paises europeos. Un gasto
navideño europeo que se destinará a belleza y cosmética, ropa, “experiencias en
vivo”, restaurantes y viajes.
Ya en España, la previsión de gasto navideño es de 795
euros por persona, según
el sondeo de la OCU, con un 68% de españoles gastando igual que el año
pasado, un 17% gastando más y otro 15% menos. Casi la mitad de este gasto
navideño se destinará a comprar regalos (370 euros), otros 132 euros por
persona a comidas y cenas, 117 euros a viajes o vacaciones, 73
euros a fiestas y cotillones, 73 euros a Lotería (la media de
gasto este año ha sido de 76 euros, desde 121 en Castilla y León a 47 en
Canarias) y los 31 euros restantes se gastarán en decoración. Otro
estudio, de Cetelem, baja el gasto navideño a 580 euros por persona y refleja las 5
mayores compras: perfumes (47%), moda (43%, juguetes (35%), calzado y complementos (35%) y libros (32%).
Otro gasto típico de esta Navidad serán los viajes: 1
de cada 4 españoles piensan viajar, la mayoría dentro de España, especialmente
a Madrid, Cataluña, Andalucía, Comunidad Valenciana y Canarias: las reservas
para estas fechas han crecido un +4% sobre el año pasado, según
Destinia, con 10 millones de viajes esperados, la mejor cifra
de la última década. Los que viajen gastarán una media de 803 euros por
persona, según Jetcost, y la mayor parte viajará un máximo de 3 días (el
43%) o entre 3 y 5 días (otro 27%), básicamente en coche (48%), avión (24%)
y tren) (10), en su mayoría en familia
(48%).
Este mayor gasto de las familias, desde finales de noviembre
a mediados de enero, se ha traducido ya en un aumento de la contratación:
la campaña navideña (desde Black Friday a las rebajas de enero) ha supuesto la
firma de 452.950 contratos de trabajo temporales (+4,7% sobre el año
pasado), según
Randstad, concentrados en la hostelería (174.190, +12,1% sobre el
año pasado), transporte y logística (160.000, -6,8%) y comercio
(119.000 contratos, +12,1%). Y repartidos sobre todo en Andalucía
(78.100 contratos,+6%) y Cataluña (69.670, +2,5%), aunque donde más
aumenta la contratación es en Extremadura (+7,5%, 7.710 contratos) y Navarra
(+6,9%, 6.040 contratos). Pero los empleados de la gran distribución se quejan porque la Navidad será un récord de ventas pero faltan trabajadores (han crecido sólo un 2% desde 2018, frente a un aumento de ventas del +23%), lo que les obliga a largas jornadas con sueldos bajos (17.285 euros, ligeramente por encima del salario mínimo).
Con todo, este gasto navideño será muy desigual,
según la situación económica de las familias españolas. Porque hay muchas que
tienen ahora más gente trabajando y pueden gastar algo más, pero muchas
otras no pueden y hay demasiadas en una situación vulnerable, pensando en
cómo sobrevivir y llegar a fin de mes, aunque sea Navidad. Así que no hay
una Navidad, sino tres tipos de Navidades, según los ingresos de las
familias.
Recordemos que casi la mitad de las familias españolas
tienen un problema, que se les agrava en Navidad: les cuesta llegar a fin de
mes. Les pasa al 47,4% de las familias (un 1% más que las Navidades
pasadas), según el INE:
un 9,1% llega a fin de mes “con mucha dificultad”, otro 12,7%
“con dificultad” y un 25,6% más “con cierta dificultad”.
Estas familias tienen dos opciones en Navidad: restringir gastos
(en comidas, regalos y viajes) o endeudarse, “tirar de tarjeta” o
pedir un crédito. Y a pesar de la bajada de tipos, esto tiene un alto
coste. Los créditos personales apenas han bajado (al
6,79%, del 6,97% que costaban la Navidad pasada), según el Banco de España.
Y si optan por la tarjeta de crédito, el último tipo era del 18,34%
en octubre, similar al 18,54% que costaban en diciembre de 2024. Y si piden
una tarjeta “revolving” (un crédito que se devuelve con una
cuota fija mensual), el tipo supera el 20% (y en ocasiones tipos
abusivos del 25 al 30%).
El otro grupo de familias, las más vulnerables,
lo tienen aún peor; su problema no es restringir gastos en Navidad o endeudarse
sino simplemente “sobrevivir”. Y son muchos, En 2024, nada menos
que 9.653.000 españoles estaban en situación de “pobreza monetaria”, según las
estadísticas europeas, porque ingresaban menos del 60% de la media del país
(personas que ganan menos de 827 euros al mes en 14 pagas o familias con dos
niños que ingresan menos de 1.737 euros mensuales). Eso significa que un
19,7% (1 de cada 5 personas) está en
situación de pobreza en España, el 6º país con más pobreza de Europa,
según Eurostat, sólo por detrás de Letonia (22%), Bulgaria (21,7%), Lituania
(21,5%), Estonia (20,6%) y Croacia (20,3%) y por encima de Italia (18,9%),
Alemania (15,5%) y Francia (15,5%).
Y dentro de este grupo de “españoles pobres”, casi la mitad
(4,3 millones de personas) están en una
situación de “exclusión severa”, según
un reciente estudio de Foessa (Cáritas), que mide 35 indicadores y refleja
que estos “españoles más pobres” son personas que trabajan en muchos casos o
que estudian o buscan empleo, no son personas “tiradas en la calle”
sino personas que pueden ser “vecinos nuestros”. Y que un 45% de
ellos viven en alquiler, lo que en muchos casos los lleva a esa pobreza
más extrema. Y no podemos olvidar que hay 2,5 millones de niños y niñas que
viven en “hogares pobres”, según
Save the Children, quien recuerda que somos el
país europeo con más pobreza infantil (29,2%).
Para Cáritas y otras ONGs, el problema de la pobreza en
España es que “se ha hecho estructural” y no
sólo afecta a minorías marginadas sino a personas y familias que tienen
un trabajo (2,5 millones de ocupados son “pobres”) y a españoles que antes
tenían una situación saneada y ahora son especialmente vulnerables, sobre todo
jóvenes, mujeres, inmigrantes y familias con hijos. Unos colectivos en
los que las ONGs concentran sus ayudas estas Navidades, de comida, ropa y
techo. Y unas personas a las que deberíamos tener presentes estas Navidades, ayudándoles en lo
posible.
En resumen, que las luces y las fiestas nos llevan a
gastar más en estos días, pero no deberíamos olvidar que a nuestro lado
hay personas que tienen problemas (también estos días) para llegar a fin de mes
y para simplemente sobrevivir, comer y pagar el alquiler. Así que celebremos
estas fiestas con nuestra familia y amigos, pero sin gastar por gastar y teniendo
presente que hay muchas personas que lo pasan mal y a los que podemos
ayudar de muchas maneras. Es la mejor manera de celebrar esta Navidad y
todas: que sea también una fiesta de la solidaridad con los que
tenemos alrededor, con ayudas, atención y cariño.
Gran Vía de Madrid: pobres junto a luces y compras de Navidad
El gasto de las familias españolas crece especialmente estos días, pero en realidad lleva creciendo desde el inicio del verano. Así, en el tercer trimestre, el consumo familiar creció un +1.2%, el mayor aumento en el último año (había crecido un +05% y un 0,7% en los dos trimestres anteriores), según el INE, lo que impulsó la economía, junto al turismo y la inversión, tras “pinchar” las exportaciones (por los aranceles y el estancamiento europeo). Y ahora, en este 4º trimestre, todo apunta a que el consumo habrá crecido algo más, empujado por el Black Friday (aprovechado para comprar anticipadamente los regalos de Navidad y Reyes) y por el mayor gasto previo a estas fiestas navideñas.
¡Feliz Navidad¡