domingo, 29 de enero de 2012

Vivienda: ayudas a la compra y recortes al alquiler

Ha sido, junto a la subida de impuestos, la decisión más polémica del Gobierno Rajoy: recuperar la desgravación a la compra de vivienda y mantener el IVA superreducido, dos medidas que cuestan 6.000 millones de euros, lo que nos van a subir los impuestos. Y todo para ayudar a las inmobiliarias y a los bancos a vender el stock de 750.000 viviendas. Una decisión contraria a lo que defienden los organismos internacionales y el Banco de España, que proponen ayudar al alquiler, no a la compra. Pero Rajoy ha quitado las ayudas al alquiler a los jóvenes y alquilar desgrava menos que comprar. Con ello, España es el país de Europa con menos alquileres y la mitad de los jóvenes viven con sus padres.

enrique ortega
Comprar un piso tenía ayudas fiscales desde 1.979, lo que ha contribuido a la burbuja inmobiliaria. Zapatero las quitó el 1 de enero de 2011, salvo para las rentas más bajas, y ahora Rajoy recupera la desgravación para la compra de vivienda habitual (desde el 1 enero 2011): se podrá deducir el 15% de la hipoteca (intereses y capital), hasta un máximo de 9.040 euros al año. Una medida que beneficia más a las rentas más altas, las que más pueden invertir y deducirse (hasta 60.266 € al año de pago de hipoteca). Además, el Gobierno mantiene el IVA superreducido del 4% para la compra de cualquier vivienda nueva, sea la habitual o segunda o tercera vivienda, una decisión que ya criticó Bruselas a Zapatero.
Las dos medidas, que benefician a unos 7 millones de españoles que pagan hipoteca, tendrán un coste anual de 6.000 millones de euros (750 la rebaja del IVA y unos 5.200 millones la desgravación), que saldrán de la subida de impuestos aprobada por Rajoy (6.200 millones) y que vamos a pagar este año unos 13 millones de contribuyentes.

El objetivo es conseguir vender más pisos y dar salida al stock de 750.000 pisos nuevos que tienen inmobiliarias y bancos. Pero es dudoso que se consiga así. Primero, porque la desgravación y la rebaja del IVA van a frenar la caída de precios (hasta un 8%, según el Banco de España), ya que con ayudas se puede pagar más. Segundo, porque para que alguien compre un piso necesita tener un empleo y confianza en el futuro: hay 5,27 millones de parados y un 16,9% de los españoles temen perder su empleo este año, según el CIS. Y tercero, porque para comprar un piso hace falta tener un mínimo ahorrado (un 30% para la entrada y gastos, unos 45.000 euros para un piso de 150.000) y que un banco o Caja te den un crédito, algo difícil (por la alta morosidad) y caro: dedicar un tercio de los ingresos a pagar la hipoteca implica ganar unos 2.000 € al mes y dos tercios de los españoles son mileuristas.

En definitiva, que las ayudas son caras y su efecto dudoso, según muchos expertos, como la OCDE, el FMI, la Comisión Europea y el Banco de España, contrarios a las ayudas a la compra de viviendas, porque alimentan la burbuja inmobiliaria y el endeudamiento. Todos son partidarios de fomentar el alquiler, pero el Gobierno Rajoy ha hecho lo contrario, con dos medidas. Una, quitar la ayuda de 210 euros para pagar el alquiler durante 4 años a los jóvenes que ganen menos de 22.000 €, lo que perjudicará a 70.000 jóvenes cada año (los 300.000 que cobran la ayuda la seguirán recibiendo hasta que acaben los 4 años). La otra, quitar la deducción por alquiler (el 60%) a los propietarios que ganen más de 24.107 €. O sea, que para desgravar por compra de vivienda no importa lo que se gane y para alquilar sí.

Además, se teme por el futuro de la Sociedad Pública de Alquiler (SPA), que gestiona 14.000 alquileres de propietarios, a los que ya está endureciendo los contratos, lo que ha provocado una campaña de reclamaciones judiciales de la OCU. Y por el futuro de la vivienda pública en alquiler, que en España es sólo del 2% cuando en Francia o Reino Unido alcanza el 15% de la VPO. Y todo ello cuando estaban aumentando los pisos en alquiler, con la crisis y las mayores facilidades jurídicas al desahucio por impago, bajando los alquileres hasta un 8 % el último año, algo que ahora puede frenarse con estas medidas, que perjudican sobre todo a los jóvenes y a las rentas más bajas.

España es un país de propietarios: 80 % de las viviendas son en propiedad y sólo hay un 16% en alquiler, frente a una media del 40% en Europa (y un 58% de alquiler en Alemania, un 42% en Francia o un 31% en Gran Bretaña, donde más de la mitad de los alquileres son públicos). Una peculiaridad que tiene mucho que ver con la cultura a favor de la propiedad (en 1.970, un 30% de la vivienda era en alquiler), con los tipos de interés bajos y con unas ayudas a la compra más generosas: Alemania o Reino Unido han suprimido la desgravación, Dinamarca o Suecia la han reducido y la mayoría de países OCDE que la tienen sólo desgravan los intereses, no el principal de la hipoteca.

La apuesta de Rajoy por la compra en vez de por el alquiler va en contra de 6 millones de jóvenes que no consiguen irse de casa (el 54,2% vive con sus padres frente a un 46% en Europa), contra la movilidad laboral (clave para reducir el paro) y a favor del endeudamiento de las familias y el ladrillo, dos factores que han causado esta crisis. Por eso muchos expertos critican estas medidas, que nos costarán una subida de impuestos para ayudar a inmobiliarias y bancos a vender sus pisos. Hay que cambiar el chip, apostar por el alquiler y ayudar a los jóvenes a emanciparse. También aquí, vamos por el camino equivocado.

miércoles, 25 de enero de 2012

Un parche de liquidez para las autonomías

Tres semanas ha tardado Rajoy en salir en ayuda de las autonomías, la mayoría gestionadas por el PP. El riesgo de suspensión de pagos de la Comunidad Valenciana ha disparado  las alarmas y se ha aprobado una inyección de liquidez de 11.000 millones, más créditos del ICO. Un parche para pagar nóminas y a algunos proveedores, pero que no resuelve el tema de fondo: poner orden en las cuentas autonómicas. El Gobierno aprueba este viernes una Ley para controlar las cuentas públicas y aplicar sanciones, pero hay que revisar también sus competencias y su financiación. Con todo, las autonomías son culpables del 70% de desviación del déficit y tendrían que recortar 15.000 millones este año. O 20.000 si entramos en recesión. Un recorte imposible.

enrique ortega
Las autonomías engañaron al Gobierno Zapatero, a pesar de las promesas hechas a la ministra Salgado, en julio y en octubre de 2011, de que iban a recortar su déficit. A finales de año, Rajoy se encontró (¿no lo sabía, cuando el PP manda en 11 de 17 autonomías?) con que el déficit público era del 8,2% (en vez del 6%) y que las autonomías eran culpables del 70% de la desviación (15.000 de 22.000 millones). Y nos subió los impuestos a todos. Cuatro autonomías son las culpables de tres cuartas partes de  la desviación: Comunidad Valenciana (21%), Cataluña (15,5%), Andalucía (14%) y Castilla la Mancha (11,4%).
Además de “descubrir” el agujero, el Gobierno se encontró, los últimos días de diciembre, con el SOS de algunas autonomías. La Comunidad Valenciana era un polvorín: no podía devolver un crédito de Deutsche Bank ni pagar las nóminas y ya había aplazado el pago de la Seguridad Social de sus funcionarios, a pesar de un anticipo de 480 millones que les dio Elena Salgado antes de irse. El Gobierno avaló de palabra la refinanciación de la deuda y Montoro adelantó otros 110 millones para pagos urgentes. Baleares también había pedido un crédito para pagar las nóminas. Y Cataluña no ingresó en diciembre ni las retenciones del IRPF ni las cuotas de la Seguridad Social de sus funcionarios.

El Gobierno dejó claro que no iba a dejar caer a ninguna autonomía. Y así, aprobó la semana pasada una inyección de liquidez de 11.000 millones de euros: 8.600 son anticipos de la liquidación que les correspondía en junio y otros 2.400 son efecto de ampliar a 10 años la devolución de deudas con el Estado. Además, se pondrá en marcha en dos meses una línea de crédito en el ICO para que paguen parte de  las deudas a proveedores: 14.000 millones de euros, el 70% con laboratorios y empresas sanitarias.

Dinero contante y sonante y créditos a 5 años (al 3%) para evitar la suspensión de pagos de algunas autonomías. No todas, ya que el problema se concentra en cinco : Comunidad Valenciana (la más endeudada, 19,9% de su PIB, y la tercera con más déficit, un 4,2% según Fedea), Cataluña (segunda más endeudada, 19,7%, y un déficit del 2,4%), Castilla la Mancha (campeona del déficit, un 5,8% del PIB, y con un 18,3% de deuda), Murcia (4,7% de déficit y un 10% de deuda) y Baleares ( 4,1% de déficit y 16,8% de deuda).  

Resueltos los pagos más urgentes, queda hacer frente a la deuda autonómica, 135.151 millones de euros (12,6% PIB). El problema ahora es refinanciarla, a un interés elevadísimo, por encima del 8%. Cataluña y Comunidad Valenciana, las más endeudadas, ya han pedido al Gobierno que les avale o que lance hispabonos, para pagar menos intereses, pero Rajoy se lo está pensando, como Merkel con los eurobonos. También le piden emitir deuda sanitaria, para financiar la sanidad.

El salvavidas del dinero llegará a las autonomías a finales de enero y ahora falta que, a cambio, pongan orden de verdad en sus cuentas. Cataluña es la única que lleva dos años de recortes serios y ha aprobado un Presupuesto 2012, con ayuda del PP, que reduce 1.535  millones entre recortes y subida de impuestos (con tasa turística y euro por receta). La Comunidad Valenciana anuncia un ahorro de 1.075 millones, con recortes a funcionarios y más impuestos. Y Castilla la Mancha ha añadido otra rebaja de 350 millones a los 1.815 anunciados hace cuatro meses y que no se acaban de concretar.
El Gobierno aprueba este viernes una Ley de estabilidad presupuestaria, para controlar el déficit, que incluirá sanciones para las autonomías que incumplan. Y habla incluso de reformar el Código penal para meter en la cárcel a los gestores manirrotos, una “ocurrencia” de cara a la galería, ya que lo que hacen falta son controles previos, que eviten más engaños y “sustos”: el ministro de Economía propone el control previo de los Presupuestos autonómicos, como exige Merkel en Europa para los Presupuestos nacionales.

Más control sí, pero hay que ir al fondo de la cuestión autonómica: cuánto deben gastar y cómo se financian. Definir con claridad sus competencias, suprimiendo duplicidades con el Estado central y los Ayuntamientos (incluida la supresión de la mayoría de sus 2.359 empresas públicas). Y revisar el sistema de financiación, del que se quejan la Comunidad Valenciana y Cataluña (por no primar suficiente la población) y Galicia, Murcia o Aragón, por primarla demasiado, Después, habrá que forzar a las autonomías que quieran gastar más, a pagarlo con más impuestos propios, no que tengamos que pagar los demás la Fórmula 1 o los desmanes urbanísticos de Camps, por ejemplo.
Al final, el problema es que las autonomías, manirrotas o no, van a tener que hacer las tres cuartas partes de los recortes de España en 2012. Tendrán que recortar de sanidad, educación, gastos sociales, infraestructuras y ayudas a empresas y empleo, dos tercios de sus gastos. Unos 15.000 millones para cumplir con Bruselas, que podrían ser 20.000 si entramos en recesión. Una cifra imposible para las autonomías. Eso es lo primero que hay que revisar. Salvo que queramos que cierren.

domingo, 22 de enero de 2012

Ser mujer, un mal negocio en España

Nacer mujer en España es tener muchas papeletas para no trabajar y si lo hace, tener un peor puesto, ganar menos que un hombre y no llegar a directiva, cobrando también menos paro y menos pensión, además de trabajar el doble en casa, según un demoledor informe del Consejo Económico y Social (CES). Las mujeres están sufriendo más la crisis, con más paro y más precariedad. Las políticas de igualdad se han quedado sin Ministerio y sin subvenciones, por los recortes. Y con pocos Planes de igualdad en las empresas, aunque son obligatorios. Pero la igualdad no es un lujo: es un derecho que empieza en casa y sigue en la educación, las empresas y en todo el país.

enrique ortega
El primer problema es que un 48% de las mujeres no trabajan ni buscan trabajo, frente a un 32% de hombres. Muchas de ellas dejaron de trabajar para cuidar a sus hijos o padres y luego no han podido volver. De hecho, un 41,3% de las mujeres españolas no buscan empleo por razones familiares (frente al 3,8% los hombres), cuando en Europa sólo son un 25%.
Pero las que lo intentan, lo tienen más difícil. En España hay 8,2 millones de mujeres trabajando (2 millones menos que hombres) y la mayoría ha tardado más en empezar: los hombres encuentran empleo cuatro meses antes que las mujeres, según el informe del CES. Y eso, a pesar de que las mujeres están mejor preparadas: hay menos mujeres sólo con la ESO, menos abandono escolar femenino, más mujeres en secundaria y más universitarias (45,9% frente a 35,7% varones), que se licencian antes y con más rendimiento. Pero quizás estudian carreras con menos salidas, como Humanidades, Ciencias Sociales y de la Salud, y menos carreras técnicas.

El hecho es que acaban teniendo un menor abanico de empleos: la mitad se concentran en 6 trabajos (14,5% empleadas domésticas y limpieza, 10,1% cuidadoras y servicios personales, 8,4% dependientas comercio, 6,4% gestión administrativa, 6,1% hostelería y 4,6% auxiliares administrativos), cuando la mitad del empleo masculino se reparte en 13 ocupaciones. Y con contratos muchos temporales (26,1 % mujeres frente a 23,9% hombres), sobre todo entre las jóvenes (58,4% temporales), y muchos contratos a tiempo parcial (23,2 % mujeres y sólo 5% hombres), no porque quieran sino porque no encuentran a tiempo completo.

Empleos con poca cualificación (a pesar de su mayor formación) y contratos precarios, junto a la necesidad de atender a sus hijos (jornadas reducidas, menos antigüedad, puestos de menor responsabilidad)  llevan a peores sueldos: las mujeres ganan un 22% menos que los hombres, según la encuesta de salarios 2009. Unos 5.300 euros menos al año, según GESTHA. Y la brecha salarial es mayor entre las mujeres con estudios superiores y directivas (-32%).
Las mujeres, además, hacen peor carrera en las empresas: sólo suponen el 29% de los directivos (35% en la UE). Y en las grandes empresas del IBEX 35, sólo hay un 11% de consejeras, aunque la Ley de Igualdad planteaba el objetivo del 40% para 2015. La Comisión Europea ha dado un ultimátum hasta marzo de 2012 para tomar medidas y conseguir un 30% de mujeres en los Consejos de las empresas europeas para 2015.

Con empleos más precarios, hay más mujeres paradas que hombres: 2.212.621 a finales 2011 (frente a 2.209.738 hombres), habiendo aumentado más el paro femenino, sobre todo entre las jóvenes (+9,48% mujeres frente a +3,52% hombres). Con ello, la tasa de paro femenino (21,5% frente al 20,9% la masculina) es la más alta de toda Europa (9,7% paro femenino frente al 9,3% el masculino). Y lo peor es que, en el desempleo, también las mujeres cobran un 15% menos: 760 € de media frente a 895 € los hombres, por sus menores bases de cotización. Además, menos de la mitad de los beneficiarios del desempleo son mujeres (44,9%, cuando en paro son 50/50) y de los parados que cobran prestaciones contributivas, sólo un 39% son mujeres.

Empezar a trabajar más tarde, con bajos sueldos, contratos precarios y carreras profesionales interrumpidas por la maternidad llevan a que las mujeres tengan también pensiones más bajas: 614,24 €  de jubilación frente a 1.034,15 €  los hombres, que son casi el doble (3,28 millones con jubilación frente a 1,73 millones de mujeres), mientras las mujeres cobran sobre todo viudedad (96%). Y lo peor, un tercio de todas las pensiones que cobran las mujeres están por debajo del mínimo (1,5 millones de mujeres pensionistas). Además, la última reforma de las pensiones perjudica más a las mujeres.

Con este panorama, las mujeres enfrentan peor su vejez, ya que además viven más que los hombres (85 años frente a 78). De hecho, dos tercios de los beneficiarios de las ayudas a la Dependencia (741.713 a finales 2011) son mujeres, que van a sufrir más los recortes y el parón de la Ley. Y con ellas, sus hijas: los mayores de 80 años dependientes son atendidos en un 40,7% por sus hijas y sólo en un 8% por sus hijos. Más mujeres sin poder trabajar.

Al final, la crisis ha frenado los avances en la igualdad de las mujeres. Pero el origen de muchas desigualdades empieza en casa, en la falta de conciliación entre hombres y mujeres: ellos dedican sólo 2,28 horas a las tareas del hogar, frente a 4,25 horas las mujeres. Y en la creencia machista de que los hijos son un tema de la mujer, que es la que pide las bajas de maternidad (sólo 1,8% hombres), las excedencias (hombres 4,5%) o las reducciones de jornada (3,5% hombres frente a 22,7% mujeres). Y si hay que dejar el trabajo por los niños, lo hace la mujer: un 23% lo han hecho, frente a un 4,8% de hombres. También falta un entorno público propicio, con más guarderías y más apoyo público a la familia, que en España es la mitad que en Europa (1% del PIB frente al 2% en la UE).

La igualdad no es sólo cuestión de cuotas y leyes, aunque Bruselas está empeñada en avanzar y queda mucho por hacer en las empresas, donde sólo un 5% de los convenios la contemplan. Es sobre todo un tema de educación y de hechos, compartiendo hijos y tareas. Y peleando en empresas e instituciones, a pesar de la crisis. Hay que conseguir que nuestras hijas y nietas sean más iguales que nuestras mujeres, madres y abuelas. Es lo mínimo.  

miércoles, 18 de enero de 2012

Innovación con recortes y sin Ministerio

La ciencia y la innovación no se han librado de los recortes: 600 millones en una primera tacada, a la espera del Presupuesto 2012. El Gobierno Rajoy ha optado por la economía del ladrillo (recuperando las ayudas a la compra de vivienda) en lugar de apostar por la nueva economía para salir de la crisis. Llevamos ya tres años de recortes, mientras los países punteros de Europa gastan más en innovación. Ahora, la clave es poner en marcha la nueva Ley de Ciencia, aprobada por consenso, y gastar mejor el dinero disponible: uno de cada cuatro euros no se gasta por falta de proyectos. Y es que las empresas, con la crisis, están reduciendo sus inversiones en I+D-i. Nos estamos jugando el futuro.

enrique ortega
                                                                                               
Los Gobiernos no han sabido qué hacer con la ciencia y la innovación desde que en 1998 arrancó el primer Plan nacional de I+D+i. Primero estuvo en el Ministerio de Educación y Ciencia (con Rajoy de ministro entre 1999 y 2000), después pasó a ser de Ciencia y Tecnología (2000), más tarde volvió a ser de Educación e Investigación (2004), con ZP, que  le dio de nuevo autonomía en 2008, llamándolo de Ciencia e Innovación. Ahora ha pasado al Ministerio de Economía y Competitividad, como una Secretaríade Estado de I+D+i, lo que desagrada a la comunidad científica, que teme que se primen los criterios económicos sobre los científicos, la innovación sobre la investigación.
Al margen de la pérdida del Ministerio, la peor noticia ha sido el recorte de 600 millones en el Presupuesto para 2012 (8.000 millones), a la espera de si hay un nuevo recorte en el Presupuesto definitivo de marzo. Con ello, habrá muchos organismos públicos de investigación (como el CSIC o el CIEMAT) que no podrán realizar proyectos y tendrán que despedir a investigadores, reduciéndose subvenciones y créditos a empresas para que innoven. Una opción política que contrasta  con otra decisión del Gobierno Rajoy: recuperar las subvenciones a la compra de vivienda y mantener el IVA superreducido, dos medidas que costarán unos 6.000 millones de euros, casi el presupuesto en I+D+i. Luego se opta por apoyar al ladrillo más que por modernizar la economía.

Con todo, el mayor problema es que Rajoy sigue la senda de Zapatero y ya llevamos tres años de recortes en I+D+i (un 30% entre 2010, 2011 y 2012), tras una congelación del gasto en  2009, después de 16 años de apuesta continuada por la investigación (desde 1992). Con ello, España se ha estancado, dedicando sólo un 1,36% de su PIB a investigación, mientras Europa está en el 2,01% y los países punteros han aumentado estos años su esfuerzo en investigación, tanto Alemania (2,82%) como Francia (2,25%) o Reino Unido (1,87%). Y seguimos en el furgón de cola de la UE: el 6º país que menos apuesta por la I+D+i.
El problema no es sólo que el gasto público en investigación se recorte sino que la crisis ha reducido también el gasto en I+D de las empresas, que sólo financian el 43% de la investigación española, cuando Bruselas planteó en la Agenda de Lisboa 2010 que deberían suponer dos tercios y en los países punteros, como Alemania, las empresas privadas realizan hasta el 70% del gasto en I+D. En España, la investigación depende demasiado del sector público y por eso ahora, con los recortes, la caída es mayor.

De hecho, 5.369 empresas han dejado de innovar en 2010, según el INE, la mitad por el recorte de las subvenciones del Estado y las autonomías y la otra mitad por la crisis y la falta de crédito. Con ello, el porcentaje de empresas innovadoras en España (43,5%) es inferior a la media europea (51,5%) y a países como Alemania (70% empresas). Y las tres autonomías con mayor porcentaje de empresas innovadoras (La Rioja, Navarra y País Vasco) son precisamente las que tienen menos tasa de paro. No es casualidad.

Los recortes y la crisis son un grave hándicap para la investigación y la innovación, pero faltan más proyectos que dinero: 1 de cada 4 euros del Presupuesto del Ministerio de Ciencia e Innovación en 2010 no se gastó, porque empresas y autonomías pidieron sólo el 60% de los créditos públicos disponibles. Y de cada 100 empresas, 34 desaprovechan las ayudas a la investigación, según un estudio de Alma Consulting. Tampoco funcionan los incentivos fiscales a la I+D. Todo porque la crisis hace que las empresas no se metan en proyectos de investigación o innovación ni en créditos que han de devolver.

Ahora, la clave es aprovechar la nueva Ley de la Ciencia, una de las pocas aprobadas con consenso entre PP y PSOE, y relanzar la investigación y la innovación, con recortes y sin Ministerio. Hay tres tareas urgentes. La primera, poner en marcha la Agencia Estatal de Investigación, un organismo independiente (con presidente elegido por 5 años) que debe estar protegido de los vaivenes políticos. La segunda, aprobar un nuevo Plan Nacional de I+D+i 2012-2015, que marque objetivos y prioridades y que consiga aunar los esfuerzos públicos y privados en investigación e innovación. Y la tercera, agarrarse como una lapa a Europa, para aprovechar los crecientes fondos europeos (80.000 millones) y los proyectos comunitarios del futuro programa Horizon 2020, que quiere apostar por relanzar la investigación en Europa, retrasada frente a Estados Unidos y Japón.  

La investigación e innovación no es sólo cuestión de dinero, aunque hace falta más (hay una campaña de firmas para recabar más fondos). Hay que inocular la I+D+i en la educación, fomentarla en las empresas (sobre todo en las pymes), simplificar las ayudas, unificar esfuerzos, potenciar las compras públicas, implicar más a las empresas y a la Universidad, obsesionarse con no perder el tren tecnológico de Europa… Y sobre todo, marcar una estrategia a medio plazo, porque la I+D+i necesita tiempo y estabilidad. Pero hay que apostar por la innovación para salir de la crisis. Como dice Juan Lerma, “hay que hacer más economía con ciencia en vez de economizar con la ciencia”. Amén.

domingo, 15 de enero de 2012

Más seguros médicos privados y más caros

Más de 10 millones de españoles pagan unos 50 euros al mes para tener un seguro médico privado, junto a la sanidad pública. Es el seguro que más crece, por las listas de espera y el temor a los recortes en la sanidad. Las compañías se han lanzado a una guerra de precios para captar nuevos clientes, pero a los que ya tienen les brean a subidas: más de un 10% este año. Y tanto las subidas como los contratos (leoninos) han disparado las quejas de los asegurados. Médicos y hospitales se quejan de las condiciones que imponen a una sanidad privada en crisis, con muchas empresas vendiéndose  a extranjeros. Ahora, las aseguradoras piden al Gobierno que pagar un seguro privado desgrave.

enrique ortega
A pesar de la crisis y de tener una sanidad pública de las mejores del mundo, España es el cuarto país de Europa con más peso de los seguros médicos privados, tras Holanda, Alemania y Francia. Concretamente, 10.677.961 españoles tienen algún tipo de seguro privado de salud :  1 millón son seguros que pagan las empresas (desgravan 500 € por empleado en Sociedades) y otros 2 millones son seguros a funcionarios, que pueden elegir entre ellos o la sanidad pública (el 85% elige los privados). El 70% de pólizas se hacen en Madrid, Cataluña, Andalucía y Comunidad Valenciana, sobre todo los que viven en grandes ciudades. Hay 55 compañías, pero dos tercios del mercado se concentra en las cinco grandes: Adeslas (24%), Sanitas (16,8%), Asisa (13,7%), Mapfre (6,3%) y DKV (6,2%).
El seguro de salud es el segundo que más dinero mueve, tras el de automóviles: unos 6.550 millones de primas en 2011. Y el que más crece (+5,6% en 2010 y +3,5% en 2011). En la última década, las primas se han multiplicado por 2,5 y desde que estalló la crisis hay 1,1 millones de españoles más con seguro sanitario. Se lo hacen por las listas de espera de la sanidad pública, para acudir a algunos especialistas como el ginecólogo (69 días de espera media), el oftalmólogo (63 días), el cardiólogo o el urólogo (57 días) y el traumatólogo (44 días), aunque en la sanidad privada también hay esperas (de 8 a 22 días, según la OCU). También para tener una habitación individual  en el hospital. Pero en el último año y medio han crecido por el miedo a los recortes en sanidad, la tercera preocupación de los españoles, tras la economía y los políticos, según el Barómetro del CIS.

Las aseguradoras han visto el negocio y llevan año y medio lanzadas a una guerra de ofertas y seguros low cost, desde 15 euros por persona si se contrata por Internet. El truco es ofertar pólizas muy básicas (microseguros), adaptadas a un cliente en crisis. Y para bajar precios, se rebajan coberturas, se aumentan los copagos y se multiplican las limitaciones. Todo con tal de ofrecer un precio atractivo que publicitar, como en los seguros de coches. Se trata de robar clientes en un mercado con mucha movilidad: si antes los asegurados estaban 15 años con la compañía, ahora no pasan de tres o cuatro.

El problema es que cuando el cliente ya está dentro, pagando unos 2.400 euros al año por familia, le llega al año siguiente una fuerte subida (en mi caso, +34%). Y después, a poco que se use el seguro, las subidas superan el 10% (en mi caso, este año, +11,2%). Y así seguirán, porque los costes sanitarios (tecnología, material, personal) están creciendo el doble que el PIB en todo el mundo. De hecho, los seguros médicos son de los que tienen menos retorno para las compañías: 7,3% sobre primas frente al 8,5% en automóviles o el 14,8% en multirriesgos.

Los seguros médicos son los segundos con más quejas y reclamaciones, duplicadas en 2010. Y no sólo por las fuertes subidas de precios. Los asegurados se quejan de las condiciones leoninas de los contratos (meses de espera para tener derecho a hospitalización o parto, obligación de estar un año, preaviso de 2 meses para cambiarse, restricciones de atención, copagos, limitaciones de las pólizas) y de que puedan echar a un asegurado por edad, porque usa mucho la póliza o tiene determinadas enfermedades, no cubriendo algunas (VIH, drogodependencias, crónicas).

Otros que se quejan son los 16.000 médicos y 255 hospitales a los que pagan sus servicios las aseguradoras, imponiendo precios y condiciones. De hecho, el 62% de los ingresos de la sanidad privada procede de los seguros médicos (otro 26% de los conciertos con la sanidad pública). Una sanidad privada cuyas cifras impresionan: 483 hospitales (el 51%), 54.000 camas (33%), 253.000 profesionales (56.000 médicos), 31 % de las operaciones y 20% de las urgencias, el 27,5 % del gasto sanitario total. Pero un sector con graves problemas financieros, que han llevado a muchas ventas (1.000 millones en 2011) y que está pendiente de vender grupos tan importantes como USP (13 hospitales y 19 clínicas), Quirón (7 hospitales), Ribera Salud (6 hospitales) o Clínica el Pilar, por los que pujan fondos de capital riesgo británicos, franceses y norteamericanos, que ya controlan gran parte de la sanidad privada española. Su objetivo es ganar tamaño para negociar mejor con las aseguradoras.

Cara al futuro, las aseguradoras han pedido al nuevo Gobierno que permita desgravar el 15% de las primas de los seguros privados a los que ganan menos de 30.000 euros, con lo que captarían otro millón más de clientes. Y si no, piden una ayuda de las autonomías (400 € por asegurado), por descargarles de gastos sanitarios (dicen que ahorran a la sanidad pública 1.448 € por asegurado al año). Lo consigan o no, parece claro que Rajoy y las autonomías van a reducir el actual catálogo de prestaciones de la sanidad pública, con lo que habrá más negocio para la privada. Será más necesario que ahora tener un seguro médico privado. Y será aún más caro. Con la salud si se juega

miércoles, 11 de enero de 2012

Menos Universidades y más ingresos

Las Universidades españolas no se han librado del ajuste y han perdido más del 10% de sus ingresos entre 2010 y 2012, con graves problemas de impagos, falta de inversiones, despido de profesores y endeudamiento. Y eso cuando se ha batido este curso el récord histórico de alumnos: 1.650.000 universitarios. Nuestra Universidad está sobredimensionada, en Facultades, títulos y alumnos, que apenas pagan un 15% del coste de sus estudios. La Estrategia 2015 pasa por subir las matriculas, sobre todo a los repetidores, aumentar las becas, reducir títulos, fusionar Universidades y conseguir más ingresos privados. Los esfuerzos hay que concentrarlos en Formación profesional, Secundaria y Educación infantil, ya que España tiene más universitarios que Europa, con el doble de paro.

enrique ortega
La Universidad se lleva un 20,7% del gasto en educación, unos 10.000 millones al año. Y lleva ya  tres años consecutivos de recortes, un 3% el año pasado (unos 300 millones), siendo España uno de los seis únicos países que recortaron el gasto universitario en 2011 (con Grecia, Irlanda, República Checa, Eslovenia e Italia), mientras crecía en el resto, sobre todo en Francia y Alemania. Este año 2012, las autonomías (que financian el 70% de las Universidades) han vuelto a hacer recortes, entre el 2 y el 5%, con lo que ya se acumulan rebajas de más del 10% desde 2009, sobre todo en Madrid, Comunidad Valenciana, Cataluña, Baleares, Galicia y Navarra. Ello está provocando problemas de tesorería, pago de nóminas, deudas a proveedores, despido de profesores y falta de inversiones y equipamiento.

Esta penuria económica coincide con un récord histórico de alumnos, 1.650.000 este curso, el cuarto que crecen después de ocho de descensos. Y eso, por la crisis, que está llevando a muchos jóvenes sin trabajo a la Universidad. Con ello, se da la paradoja que España tiene tantos universitarios como Francia o Gran Bretaña y casi tantos como Alemania, con mucha menos población. De hecho, hay más estudiantes de Derecho en Madrid que en todo el Reino Unido. Y tenemos un 29% de universitarios, más que Francia (25%), Alemania (25%) y la media de la UE (27%). Eso sí, en cambio, casi la mitad de la población tiene un nivel de formación de la ESO o inferior (48,2% entre 25 y 64 años, frente al 23,2 % en Europa) y  un 22,1% tiene un nivel medio (Bachillerato o FP de grado medio) frente al 48,9 % en Europa.

En suma, que nos sobran universitarios y nos falta formación básica y media, sobre todo en Bachillerato y FP, así como guarderías.Por eso, hay que destinar los recursos escasos a estas enseñanzas y poner orden en la inversión universitaria, aunque todavía es inferior a la europea (1,1% del PIB, como Alemania, pero inferior al 1,4% de Francia o el 1,5% de la OCDE). Una inversión poco rentable socialmente, ya que la crisis ha convertido a la Universidad en una fábrica de parados, titulad@s que reparten pizzas o trabajan de cajeras, con una tasa de paro del 12,4% frente al 6% de desempleo entre los universitarios europeos. Y España es el país europeo con más trabajadores sobrecualificados: 31% (frente al 19% UE) tienen un empleo por debajo de su nivel.

Hay quien dice que sobran Universidades, ya que se han duplicado desde 1985 y tenemos 78 (50 públicas y 28 privadas), con 236 Campus, en casi todas las ciudades con más de 50.000 habitantes. De hecho, en Levante hay tres Universidades (Elche, Alicante y Murcia) a pocos kilómetros de distancia, lo mismo que las 6 de Madrid o las 7 de Barcelona. Con todo, el mayor problema es que todas ofrecen casi lo mismo: las 5 Universidades de la Comunidad Valenciana ofrecen Medicina y hay 41 Facultades para estudiar Periodismo, 19.000 alumnos y 3.000 licenciados al año que van la mayoría al paro. De hecho, se ofrecen 2.338 grados y 2.429 másteres, una oferta tan excesiva que el 47,7 % de las enseñanzas tienen menos de 75 estudiantes nuevos matriculados cada año (y el 28,7% menos de 50 alumnos). Un despilfarro que obliga a tener más profesores que otros países: 9 por cada 100 universitarios en España frente a 6 profesores en Europa. Un extra coste de 2.100 millones al año.

Pero eso no es todo. Un 30% de universitarios abandonan sus estudios y otro 40% son repetidores, lo que cuesta otros 3.000 millones al año. Muchos creen que si pagaran más, se esforzarían más: ahora pagan un 15% del coste de su enseñanza, unos 1.000 euros sobre 8.500 (y 2000 en los Master).Este curso, las Universidades han subido las matriculas entre el 3,6 y el 7,6%, con mayores aumentos para repetidores, lo que ha provocado una oleada de protestas. La Estrategia 2015, apoyada por los Rectores, pasa por actualizar tasas (más a partir de 2013) y que los repetidores paguen del 50% al 100% del coste (3ª vez). A cambio, aumentarán las becas, menores en España (0,08% PIB frente al 0,25% en la OCDE).

Menos títulos, menos profesores, más ingresos de los alumnos que puedan pagarlo y una fusión entre Universidades, con una mayor especialización y más colaboración con los investigadores y las empresas, para conseguir otras fuentes de ingresos, promoviendo los Campus de Excelencia Internacional. Por ahí va la Universidad del futuro, que deberá competir en Europa (Bolonia) y en un mundo global, donde hoy no tenemos ninguna Universidad en el Top 100 mundial (la primera, la Universidad de Barcelona, está en puesto 176 del QS World Universities Ranking).

Apostar por la Universidad es apostar por el futuro y por eso, el nuevo Gobierno y las autonomías deberían suavizar los recortes. Pero hace falta poner orden, fomentar los estudios que tengan salida (hay demasiados alumnos en Ciencias Sociales y Jurídicas y pocos en carreras técnicas), sanear las cuentas cobrando más a los alumnos que puedan pagarlo y consiguiendo más ingresos de las empresas y la investigación. Concentrar los esfuerzos (públicos y privados) en menos Universidades, más competitivas y de más calidad. Y que los universitarios aprovechen mejor su oportunidad, sacando el máximo partido de unos estudios que pagamos todos. Y que han de sacarnos de la crisis.     

domingo, 8 de enero de 2012

Gasóleo a precio de gasolina

Más de la mitad de los automovilistas tienen ya un coche de gasoil, porque gasta menos y un carburante más barato. Pero se ha roto la tendencia y el gasóleo ha costado más que la gasolina durante un mes, aunque ahora esté más barato. Y pronto volverá a subir, por la mayor demanda de vehículos y calefacciones. También por los impuestos, que ya han subido el 1 de enero para transportistas y taxis. Bruselas quiere equiparar los impuestos de la gasolina y el gasóleo, que además son más bajos en España. Y penalizar más al gasóleo a partir de 2015, por sus emisiones de partículas, peligrosas para la salud. Quizás haya que ir pensando en volver a la gasolina. O mejor, a los híbridos y al coche eléctrico.

enrique ortega
En la semana del 14 de noviembre, el gasóleo pasó a costar 1,310 €/litro, más caro que la gasolina (1,29 €), algo que no ocurría desde marzo de 2008. Siguió subiendo y con un precio mayor un mes más, aunque ahora esté por debajo, debido a que paga menos impuestos que la gasolina (10 céntimos menos), ya que la cotización internacional del gasóleo lleva subiendo desde abril y sobre todo desde septiembre. Y por eso, el precio del gasóleo subió a los automovilistas en 2011 más del doble que el de la gasolina (10,8% frente a 4,2%).
Del precio del gasóleo en el surtidor, un 42,18% son impuestos (especiales, IVA y el céntimo sanitario autonómico) y algo más de la mitad son los costes de producirlo (46,30%) y los costes de almacenarlo, transportarlo, distribuirlo y venderlo (11,52%). El coste del gasóleo en los mercados internacionales lleva nueve meses por encima de la gasolina debido al fuerte aumento de la demanda mundial, por varias razones. La principal, el mayor consumo de China, India y países emergentes, que usan el gasóleo para el transporte terrestre, marítimo y ferroviario, para la continua mecanización de su agricultura y el creciente parque de automóviles, así como para la industria y generar electricidad. Otra, el cambio en EEUU, donde ha subido la demanda del gasóleo y ha caído la de las gasolinas. La tercera, el aumento de vehículos diesel en Europa (del 25 % de nuevas matriculaciones en 1998 al 50 % en 2010). La cuarta, el invierno, que aumentó la demanda de gasóleo de calefacción. Y como colofón, el cierre inesperado de algunas refinerías, en Asia.  

Más demanda, menos oferta y un gasóleo que hay que importar en buena medida (Europa en un 10% y España un 38%), porque las refinerías no se han adaptado al cambio en la demanda (en España han invertido 6.000 millones para reajustarse). Y eso supone pagarlo en dólares con un euro depreciado (-10% en 2011), lo que aumenta la factura. Al final, el problema es mayor para España, no sólo porque importamos más sino también porque consumimos más: el 80% del consumo de carburantes es gasóleo (en Europa es el 55%), debido a que tenemos más peso del transporte de mercancías por camión (83% en España y 45% en la UE-27) y un mayor parque de vehículos diesel: el 52% frente al 37% en la UE.

La fiebre del diesel en España es relativamente reciente. En 1990, sólo iban con diesel el 10% de los vehículos, básicamente camiones y taxis. En el 2000 se pasó al 29% y ahora es el 52 %, el parque con más diesel de toda Europa, salvo Francia y Bélgica. Y, lo más llamativo: son diesel el 71 % de los vehículos vendidos en 2010. La mayoría ha optado por el diesel porque gasta menos (entre un 10 y un 40%), es un motor más duradero (hasta 400.000 km, aunque ahora, los de gasolina con inyección electrónica llegan a 300.000 km) y era un carburante más barato, lo que compensaba el mayor coste del vehículo (entre 2.000 y 5.000 €) y un seguro y mantenimiento más costosos, siempre que se recorrieran más de 25.000 km al año.

Ahora, esos argumentos pueden cambiar en contra del diesel si, como parece, el gasóleo sigue encareciéndose y vuelve a costar más que la gasolina. Primero, porque la demanda va a seguir alta, al menos hasta primavera, lo que seguirá tirando al alza de los precios internacionales (y más con un petróleo al alza, por  la tensión en Irán e Irak). Segundo, porque importar gasóleo nos costará más euros, al debilitarse la moneda europea en 2012 (hasta 1,20 € por dólar). Y sobre todo, porque van a subir los impuestos del gasóleo.

De hecho, a los 200.000 transportistas profesionales (camiones, autobuses y taxis) les cuesta más caro el gasóleo desde el 1 de enero, al obligar  Bruselas a España a no devolverles los 2,9 céntimos por litro que percibían de bonificación. Además, la Comisión Europea va a imponer una armonización fiscal que, en el caso de España, supondrá subir el gasóleo 8 céntimos por litro (ahora pagamos 13 céntimos menos de impuestos que la media UE). A medio plazo, Bruselas quiere que el gasóleo y la gasolina paguen los mismos impuestos. Además, proponen combatir con más impuestos a los carburantes más contaminantes y el gasóleo se lleva la palma: emite menos CO2 (aumenta efecto invernadero, pero no es tóxico) que la gasolina pero seis veces más partículas PM 2,5 y más óxido de nitrógeno (NO2), ambos muy nocivos para la salud. Y en  2015 entra en vigor una Directiva que limita las emisiones de NO2 de los diesel.

En definitiva, los precios, los impuestos y la contaminación se conjuran contra los vehículos diesel en los próximos años, lo que va a obligar a una difícil reconversión del sector del transporte (más ferrocarril, más barcos y menos camiones) y  a un cambio de mentalidad de los conductores privados, con una posible vuelta a la gasolina, mientras ganan peso (despacio) los híbridos y el coche eléctrico, sobre todo para las ciudades, que van a vetar cada vez más al coche de gasoil. Eso seguro.

miércoles, 4 de enero de 2012

Menos juguetes y de más calidad

Otro año más, las casas se llenan de juguetes, un gasto al que no se renuncia a pesar de la crisis, aunque se gaste menos. Este año, la bajada de precios de los juguetes parece tocar techo, con promociones y vales para comprar el resto del año. A la industria juguetera le están subiendo los costes y ha entrado en vigor una normativa europea de seguridad, la más estricta del mundo. Siguen las ventas de juguetes low cost, la mayoría chinos, pero se valora más el juguete de calidad, que debe competir con los videojuegos. El futuro pasa por comprar menos juguetes (los niños tienen demasiados) pero de más calidad.

La crisis pasa factura a las compras de Navidad, pero menos a los juguetes, que siguen siendo un gasto prioritario de todas las familias, aunque se espera un 5% menos de ventas, por tercer año consecutivo. Dos tercios de las familias gastarán lo mismo y una de cada cuatro gastará menos, con una media de 205 euros por familia, 79 euros menos que las navidades pasadas, según un estudio de Eroski Consumer. Un gasto que es mayor en Andalucía (253 €) y menor en Baleares (188 €), Castilla la Mancha, Galicia y Comunidad Valenciana (190€).
Este año, las compras están siendo más meditadas, según la patronal del juguete: los padres analizan más y comparan, con la ayuda de Internet (aunque sólo un 6% son compras online). Y no sólo miran el precio, aunque todavía dos de cada tres juguetes valen menos de 30 euros. Pero la mayoría siguen siendo de marca (60%), aunque todavía un  tercio de las ventas son juguetes low cost, productos sin calidad y seguridad, la mayoría chinos. La novedad este año son las promociones: la entrega de vales para comprar juguetes el resto del año, en un intento de desestacionalizar las ventas de juguetes, ya que el 70% son en Navidad y Reyes.

Otra clave de este año es la insistencia en la seguridad. El 20 de julio entró en vigor la nueva Directiva europea 2009/48, con objeto de homogeneizar todas las normas de etiquetado y seguridad de los juguetes que se venden con el sello CE (ver vídeo), el más exigente del mundo. Con ello, se crea una red europea de alertas (Rapex) para juguetes inseguros y se establecen unos laboratorios que han de analizar y autorizar los juguetes europeos, entre ellos el español Centro Tecnológico del Juguete. Todo ello, pare evitar la inseguridad actual: sólo en la Comunidad Valenciana se han decomisado esta Navidad cerca de 100.000 juguetes que incumplen la normativa. Y un tercio de los juguetes fabricados en China tienen metales pesados y fallos de seguridad, según un análisis de Greenpeace.

El esfuerzo por la calidad y la seguridad hace que las jugueteras españolas no puedan bajar ya más sus precios, después de la guerra de los últimos años, que, junto a la caída de ventas, ha provocado pérdidas a un 35% de las empresas. El sector juguetero español, el segundo fabricante de Europa (tras Alemania) se ha ido salvando con las exportaciones, un tercio de las ventas, centradas en Europa (80%), sobre todo en Portugal (25,8%), Francia (21%), Italia (10,3%) y Alemania (7,5%). Pero ahora, tienen problemas para seguir creciendo, por tres razones. Una, que les están subiendo los costes: la mayoría fabrica una gran parte de los juguetes en China, con sueldos miserables (menos de 1 euro la hora) pero que crecen un 10% anual, lo mismo que el transporte y las materias primas. La otra, que se enfrentan a unos pocos distribuidores (entre 10 y 15 híper y grandes almacenes), con mucho poder, que les imponen precios y condiciones. Y la tercera, ligada a la anterior, que son  un sector muy atomizado: 221 empresas, la mayoría (86%) pequeñas, con menos de 50 trabajadores.

El futuro de la industria española del juguete, concentrada en la Comunidad Valenciana (43% ventas) y Cataluña (31%) pasa por fusiones e inyección de capital, para invertir en innovación (un tercio de los juguetes son nuevos cada año) y redes para vender más fuera, sobre todo en Estados Unidos y Latinoamérica. No es casualidad que la empresa líder del sector, Famosa, fuera vendida en 2010 a la firma de capital riesgo estadounidense Sun Capital, tras dos años de pérdidas y fuerte endeudamiento. Es un sector que exige más tamaño y fuertes  inversiones. Y también un cambio en la mentalidad de los compradores españoles, que tenemos que valorar más el juguete seguro y de calidad, más caro.

Un tema de fondo es que los niños son niños cada vez menos tiempo: maduran antes y por eso el juguete tradicional, el de las jugueteras españolas, tiene menos demanda. Los más vendidos son los juguetes infantiles (18,6%), las muñecas (16,4%), los juegos (11.7%), los deportivos (11,5%) y las películas. Pero a partir de los 7/8 años, los niños y niñas ya no piden estos juguetes tradicionales, sino los electrónicos y, sobre todo, los videojuegos, dominados por la industria japonesa y norteamericana. Por eso, la industria española y los educadores se han aliado en defensa del lema “aprender jugando”, para apoyar los juguetes educativos, una batalla perdida sin el apoyo de los padres, que hemos de luchar contra tanta maquinita alienante

Otra cuestión es que los niños de ahora tienen demasiadosjuguetes y por eso no los valoran como antes: unos 12 de media al año, 8 de ellos en Navidad. Es el fruto de padres, abuelos y tíos lanzados a la compra de “algo” para cada niño, que acaba en una ristra de juguetes low cost. Como en el amigo invisible, hay que optar por menos juguetes, más seguros y de más calidad, más caros. Juguetes de más valor añadido, que se valoren y duren más, que diviertan y eduquen a la vez. Es una asignatura pendiente de padres e hijos. Hay que pedírselo a los Reyes. Y nuestra industria juguetera nos lo agradecerá.

domingo, 1 de enero de 2012

2012 : Feliz Año peor

El 2012 es bisiesto. “Año bisiesto, año siniestro”, dice el refrán. Y se presenta bastante negro: volvemos a estar en recesión, con menos crecimiento y más paro. Y más con las medidas del Gobierno Rajoy: más recortes y subida de impuestos que retirarán del consumo y la inversión 15.100 millones. Va a ser  también un mal año para Europa, con recesión y nuevas crisis de la deuda. Además, los españoles están muy pesimistas y siguen temiendo por su trabajo, con lo que consumen lo mínimo. Y las empresas, sin ventas, no invierten ni crean empleo. Un círculo vicioso que sólo se puede romper desde el Estado, intentando reanimar la economía. Pero esa no es la opción de Merkozy ni Rajoy, que siguen el camino contrario, el de los recortes. Hasta que el enfermo entre en coma.


enrique ortega
El Gobierno Rajoy ha aprobado los primeros recortes, 8.900 millones en el gasto de todos los Ministerios, sobre todo las inversiones de Fomento (1.612 millones) e Industria (1.091), las ayudas y subvenciones de Economía (1.083) o Exteriores (1.016) y las transferencias a autonomías y Ayuntamientos (1.040). Además, y por sorpresa, ha aumentado impuestos por otros 6.200 millones: pagaremos más en el IRPF (subirán las retenciones en la nómina de febrero), en los impuestos por depósitos o dividendos y en el IBI de la vivienda. En total, 15.100 millones menos de inversión pública y de menor consumo de los particulares, lo que reducirá aún más la actividad económica, aumentando la recesión y el paro.
Además, se vuelve a congelar el sueldo de los funcionarios y el salario mínimo, mientras las pensiones sólo crecerán el 1%, con lo que los pensionistas también perderán poder adquisitivo, ya que la inflación 2012 será al menos del 1,6%. Y si encima el Gobierno y la CEOE fuerzan a una congelación de salarios en 2012, no habrá forma de reanimar el consumo ni la demanda este año. Y así, las empresas no conseguirán remontar sus ventas y crear empleo. Sólo se ha decidido reanimar la vivienda (no renuevan las ayudas a los jóvenes para el alquiler), con ayudas fiscales y un IVA superreducido, pero nadie compra casa si está en paro o teme por su empleo y encima es difícil y caro conseguir una hipoteca.
En definitiva, Rajoy ahonda en los recortes de Zapatero (15.000 millones en mayo de 2010), que nos ha llevado a la actual recesión, como ya reconocen el Banco de España y el propio ministro de Economía. Y todavía habrá más recortes en marzo, con el Presupuesto 2012, por culpa de un posible mayor déficit 2011 (por el agujero de las autonomías): habrá que recortar (y también subir impuestos, quizás el IVA) otros 21.400 millones, otro palo para ahondar más en la recesión y en el paro, el doble que el de Europa.
El mayor problema es que España está estancada en una Europa que tampoco crece. En el tercer trimestre, la zona euro sólo creció un 0,2%, pero la previsión de la OCDE es que haya caído un 1% en el cuarto trimestre de 2011. Y que caiga también en el primer trimestre de 2012 (-0,4%), con las tres grandes economías en recesión, al caer el crecimiento dos trimestres: Alemania (-0,6% y -0,3%), Francia (-0,6% y -0,8%) e Italia (-1,2% y -0,8%). Un mal comienzo para 2012, al margen de los problemas adicionales por la crisis de la deuda.
Con este panorama europeo, todo apunta a que 2012 será un año peor que 2011 para España, con crecimientos negativos quizás hasta el verano, empujados por los recortes, los ajustes salariales y de empleo y la esperada desaceleración de las exportaciones y el turismo, por la recesión europea. La previsión de la UE es que España crezca en 2012 un 0,7% (frente a 0,8% en 2011), pero la OCDE lo rebaja ya al 0,3%. Y entre los expertos españoles, la apuesta media es crecer sólo un 0,2%, la tercera parte que en 2011. Y en todos los casos, apuestan por más paro: subiría del 21,5 al 22,5 %.
Lo peor es la desconfianza de los españoles: el 71,1% cree que la situación económica dentro de un año será igual o peor, según la última Encuesta del CIS. Y el 94% ven lejos la recuperación, según Metroscopia. Así no se va a reanimar el consumo, que aporta más de la mitad del crecimiento. Y más cuando un 17% de españoles ven muy o bastante probable perder su empleo en 2012 (Encuesta CIS). Con este panorama, la mayoría de las empresas prevén seguir reduciendo su inversión y recortando sus plantillas en 2012, según una encuesta de las Cámaras de Comercio. Incluso los autónomos de ATA, que han celebrado la llegada de Rajoy, reconocen que un 80% no contratarán a nadie en 2012.

Con todo, la clave de 2012 no estará en España ni en Rajoy, sino en Europa. Si la zona euro no sale de la crisis y empieza a crecer, difícilmente creceremos nosotros. Y si persisten los problemas, hay un riesgo de contagio a EEUU y a los países emergentes, que nos llevaría a una crisis como la de la Gran Depresión de los años 30, según ha advertido el FMI.
El premio anticipado de la Lotería ha sido la subasta del BCE el 21 de diciembre, que prestó 500.000 millones a los bancos europeos a 3 años. Un respiro de liquidez, aunque de momento los bancos lo han depositado en el BCE y lo usarán este año para devolver su deuda (800.000 millones de vencimientos) o comprar deuda pública antes que en prestárselo a empresas o particulares. Y es que hay un  problema de solvencia: las empresas están muy mal y la morosidad sigue por las nubes, con lo que unos no piden y otros no se atreven a prestarles.

A pesar de este respiro del BCE, el problema de Europa no está resuelto, porque lo que temen los mercados es la recesión, que ya ha llegado a Italia y se anuncia en Francia, país amenazado como otros por las agencias de rating. La clave estará en las elecciones de abril, que podría perder Sarkozy. Con un inquilino socialista en el Elíseo y la presión de la recesión en toda Europa, Merkel y Bruselas podrían verse forzados a reanimar la economía europea, suavizando los ajustes. Es la única esperanza de 2012. Si no, será un año bastante negro.